viernes, febrero 02, 2007

He pasado por espacios desiertos, buscando tu sombra en los espejos.
He mudado de piel cincuenta veces, para ver si te reconocías en mí.
He jugado juegos peligrosos, siempre con la mira en tu mirada.
He cantado horrorosamente para grandes auditorios, esperando encontrate entre el público.
He reducido mis instintos a su mínima expresión, a la espera de que un día los hicieras estallar.
He visto estrellas donde antes veía noche cerrada.
El sol y la luna me han sonreído con sólo recordar tu nombre.
Las puertas se me han abierto siempre que quería dejarte pasar.
Ahora me pregunto: ¿dónde termina esto, faro de luz de mi alma adolescente?

No hay comentarios: