sábado, marzo 31, 2007

Cuando todo se inunda,
y es preciso
construir puentes,
socavar las almas,
cuando todo se agrieta,
y por los poros
aparecen paisajes subterráneos,
cuando todo se estira,
y el adentro
se asemeja a una cárcel
no enrejada,
surge en mi mente,
a la que sopla un hada,
tu presencia tranquila,
tu contorno,
tu lápiz y papel,
tus marejadas,
el atisbo de tu voz,
un beso que se fue,
más hielo,
nada.

lunes, marzo 26, 2007

Extraviar los rumbos sin permiso.
Echar a volar el duende del silencio.
Esconderse en un jardín de risas.
Entender el murmullo de los vientos.
Coronar madreselvas con los ojos.
Cantar sin que se espanten los vecinos.
Concebir una tregua y un destino
cambiando el derrotero de los pasos.
Desmembrar a los monstruos de la siesta.
Descubrir la virtud de los zaguanes.
Deslindar un secreto de una pena.
Darles la bienvenida a los romances.

jueves, marzo 22, 2007

Me pregunto qué queda de tanto vuelo,
tanto sueño remoto, tanta esperanza fresca.
Me pregunto qué queda de tus canciones,
y aquel himno a la vida que eran tus letras.
Ahora todo se reduce y se atomiza,
se vuelve doméstico y cercano.
Nada de aquellos viajes de ultramar
donde tu musa soñaba con mis manos.
Estruendo en mi cabeza: diez mil cristales
astillándose al tiempo que te despiden,
y te ven irte, fresco, como si nada,
como si lo vivido fuera cenizas.
Dónde está, mago bendito de mi alborada,
tu varita de versos al por mayor.
Dónde, tu estela sabia, tu sabia huella,
que edificó mi rumbo con un rumor.

martes, marzo 20, 2007

Mareas de besos perdidos
nadan en mi boca, seca,
mientras tu estela se aleja
por universos distintos.
Tu voz, la más extrañada,
tu cara, la más querida,
el repaso de mi vida
y este gusto casi a nada...
Los recovecos del tiempo
mintiéndome vidas nuevas;
tu caricia ya remota
en un barco que zarpó.
No sé quién es, si soy yo,
no sé si vos te alejaste,
no sé en qué oscuros trances
se perdió el contacto ayer.
Solo sé que fui mujer
en los brazos del delirio,
y que en mi boca, mil vidrios
juegan al asesinato,
mientras me escondo y me escapo
de tu indiferencia nueva,
en la cueva de tus ojos
que me miran sin estrellas.

viernes, marzo 16, 2007

Un poema más de Raffaello:

NOCTURNO PROLONGADO EN MI CIUDAD

Todo signo
sensible al llamado de la mùsica
se une en un abrazo

,casi mìstico
crepùsculode aguas ausentes
que fluyen tranquilasen su cauce frìo
y bajo sus puentes de hielo,
donde el suenho se desesperao sofoca a veces
su penaen una lìnea blancade lùcido èxtasis sin retorno
eso tambièn es mi ciudad:
sobre todo cuando el sol empieza a perderse
detràs de los àrboles de un parque de San Niccolò
para acabar agònico su palabramàs allà de "L' Indiano"...
Y tambièn la luna es mi ciudad
cuando sobre San Miniato vigila
y en pensamientos inmòviles extingue su trayectoria,
y va afilando sensaciones
al cristal de los inviernos que se fueron...

Y yo tambièn soy mi ciudad
cuando cruzo "Santa Trìnita"
y me pierdo por las calles llenas de limpia soledad
esperando que abra el primer bar
en San Frediano
para desayunarme,
esperando que suba el sol para acostarme,
esperando que llegue tu SMSpara dormirme...

Firenze, 4 Febbraio 2007

Raffaello

lunes, marzo 12, 2007

Otro bello poema de mi amigo Raffaello:

SIN PRISA
Dejar florecer una sonrisa

en el resguardo de un llanto,
una sonrisa que me acompanhe
por todo lo que aùn me queda de vivir...
Improvisar una melodìa

sobre un ritmo en 5/4,
y luego bailarlo como un vals
en la avenida que lleva a la puesta del sol...
Rescatar imàgenes desde el pasado,eso sí,

pero sin la necesidad y la necedad
de volverlas a vivir
en cualquiera de los dos lados de lo onìrico...
Y enfìn escuchar la melancolìaintesa

de un violìn en agonìa,
justo fuera de la ventana...
Y finalmente acostarme:

cerrar los ojos,y esperar la eternidad...
Sin prisa.

miércoles, marzo 07, 2007

Dos luciérnagas ciegas ejecutan
un vals para los días del olvido.
Un bandoneón perdido se persigna
con un tango moderno.
Un cachafaz -de los de antes- canta
apoyado en el farol de los encuentros.
Y la mina de turno se consagra
con un beso de cine.
Un suspiro de ayer, hoy reciclado,
atraviesa las ondas del espacio,
y en aquel cafetín de los días idos
se arma una trifulca inesperada.
El galán de la historia sube al podio
de los desesperados, los perdidos.
Y una nube de versos se desprende
de su boca austral, desaforada,
mientras el Tata Dios descorre el velo.
Y entonces...se encuentran las miradas.

lunes, marzo 05, 2007

Encontrar en los amigos
el remanso que esperaba.
Convencerme,
de una vez para siempre,
convencerme,
de que las formas del amor romántico
están obsoletas.
Que existe el amor filial,
el amor por la humanidad...
pero ese estúpido "vos y yo"
que la gente busca,
testaruda,
es sólo una convención social,
un paliativo para la soledad,
una duda.
Convencerme.
Y dejar ir
el fantasma de tu imagen
de mi mente.

domingo, marzo 04, 2007

Yo sé que estas nubes también pasarán.
Y esta angustia que me cierra el pecho,
pasará y será polvo.
Sé que tu memoria también pasará,
que no quedará un rastro
de tus ojos traviesos
en el disco rígido de mi cerebro.
Lo sé.
Sé que vendrán días coloridos,
y que este gris uniforme
que lo cubre todo,
será de una buena vez historia.
Lo sé, claro que lo sé.
Pero mientras tanto...

sábado, marzo 03, 2007

Otro hermoso poema de mi amigo Raffaello:

NOCTURNO

Un aire diferente,
fresco de noche,
separa de la noche
las sombras:
aquellas que silenciosas
caminan
al paso con la memoria.
Un aire fresco,
limpio en su imagen,
tinhe las calles
hùmedas,
y envuelve las sombras:
las que se han quedado atràs,
y las que me esperan
detràs de la esquina,
fantasmas de seda
que en esta noche
me atraviesan
el cuerpo y el alma.

jueves, marzo 01, 2007

Tengo ganas de escribir algo diferente.
Escribir, por ejemplo, que todo lo que miro y todo lo que escucho, todo lo que huelo y todo lo que toco, tiene tu nombre.
Escribir que hemos transitado un larguísimo camino hasta aquí. Camino lleno de obstáculos y precipicios, de desesperanza y desilusiones, de impaciencia y de desencanto.
Pero llegamos.
Llegamos a este punto en que ya no me importa qué pienses de mí. En que lo único que ansío es darte un poco de alegría.
A este punto en que el pasado, este largo pasado compartido por más de quince años, no importa demasiado, es sólo anecdótico.
Lo que de verdad importa es que el presente nos encuentra cambiados: a vos, tal vez, un poco más paciente; a mí, feliz, aunque cuando comenzó la historia, allá por el noventa, yo era la viva imagen de la desesperación.
Y. como todo aprendizaje, creo que este largo recorrido nos ha vuelto mejores personas.
Gracias.